Las claves de los raros casos de éxito en el control poblacional de la obesidad

tal y como te comentaba el jueves pasado, el manejo de la obesidad se resume en una historia de fracaso en lo que a salud pública concierne: salvo contadas excepciones (y hoy te traigo una de ellas) nadie ha controlado, y mucho menos invertido, el avance de la obesidad.

en este sentido, la mayor parte de estudios que abordan esta peliaguda cuestión coinciden en mencionar una serie de factores indispensables para, aparentemente, poder ver la luz. entre ellos lo más repetidos, y a su vez menos puestos en práctica son dos:

  • las administraciones han de asumir el liderazgo, en serio, para poner coto a la cuestión de la obesidad.
  • el problema ha de ser abordado de forma multidisciplinar con estrategias encaminadas a la mejoras de todos los actores implicados en el problema.

es decir, mientras no sean los gobiernos quienes tomen el toro por los cuernos no va a haber nada que hacer… en vez de hacer el paripé, como acostumbran; y mientras el problema no sea asumido con medidas que afecten a todos los sectores implicados (consumo, entorno familiar, entorno escolar, profesionales sanitarios, publicidad, etcétera) difícilmente se observarán avances en este sentido. en sentido inverso, de no hacerse así, el problema seguirá igual, y más probablemente, peor.

finlandia

pero una “pequeña” localidad de finlandia puede servir de muestra para poner en evidencia como, además de lo que dicen los estudios, en la práctica, se le puede dar la vuelta a la tortilla. pero eso sí, para que así suceda hay que asumir en todas sus consecuencias los factores antes mencionados: que las autoridades se lo tomen por una vez en serio y, además, haya un conjunto de medidas puestas en práctica que afectan a todo el mundo.

el ejemplo concreto

se trata de la pequeña ciudad de seinäjoki, que tiene una población cercana a los 60.000 habitantes. en ella, tal y como pone de relieve la oms, hace 6 años una quinta parte de su población infantil con menos de cinco años contaba con exceso de peso. sin embargo, fruto de una amplia campaña nacional se pusieron en marcha una serie de propuestas y, a día de hoy, la población de menos de cinco año en esa situación se ha reducido a la mitad, pasando del 20% en 2010 a cerca del 10% en la actualidad. un paso reamente impresionante, máxime teniendo en cuenta que pocos colectivos han logrado este tipo de éxitos en el terreno de la obesidad.

¿qué como lo han hecho? pues como te decía poniéndose manos a la obra de verdad y emprendiendo una acción mancomunada, todos a una, para darle la vuelta al problema: el propio gobierno finlandés a partir de su ley para la ciudadanía por la salud, ha decidido que “la salud” sea un criterio clave a la hora de tomar cualquier decisión política y, por ejemplo:

  • desde la planificación de urbanismo se han cambiado los patios de las escuelas para promover la realización de más actividad física.
  • en lo que respecta a la nutrición y también en las escuelas se han rediseñado los menús para ofrecer menos azúcar con los alimentos y para procurar menús más saludables.
  • desde el departamento de sanidad se han planificado revisiones anuales gratuitas sobre el tema con formación específica para los profesionales de la salud, al tiempo que se han dirigido campañas de educación nutricional para los padres, de forma que ahora ellos están más concienciados y saben como afrontar mejor estas cuestiones.
  • dentro de esa estrategia nacional, finlandia está realizando recomendaciones concretas para reducir el acceso a alimentos especialmente dulces, altos en grasas y a las bebidas azucaradas en las máquinas expendedoras de los colegios, así como normas que regulen (y se cumplan) la publicidad de alimentos dirigidos a los niños.
  • además, los dulces, chocolates, refrescos, helados, chucherías y productos alimenticios de semejante… ralea, han sido gravados con el impuesto de comercialización más alto posible.
  • en los colegios se imparten contenidos de nutrición, dietética, salud y cocina

pero como te decía, aunque hoy sea la ciudad de seinäjoki la que se pone como ejemplo, todo parte de una estrategia nacional. así, el instituto nacional de salud y bienestar social, dependiente del ministerio de asuntos sociales y salud de finlandia, está ayudando a los municipios a que implementen las políticas nacionales. a su vez los municipios pueden realizar un seguimiento de su progreso con regularidad en los sitios web nacionales de vigilancia, además de compartir las mejores prácticas y asistir a cursos de formación para aplicar la legislación vigente incorporando la salud como una prioridad en todas sus políticas.

lo que se hace en otros países (entre ellos españa)

la incorporación en la dimensión más amplia posible del concepto de salud pública en todas las políticas de un gobierno, y que esta medida termine por implicar a todos los sectores, parece algo terriblemente complicado. un asunto solo apto, parece, para países con una larga tradición en su implicación en cuestiones de salud pública, tal y como es el caso de los países nórdicos. mientras que finlandia es líder en este tipo de políticas, otros países carecen de la ¿capacidad, perspectiva, habilidad, arrestos…? para así hacerlo e integrar la salud pública como una prioridad en todos sus planes sectoriales.

mientras esta perspectiva no cambie a ojos de nuestras autoridades, ya nos podemos untar las orejas con vino… ya que de poco o nada servirán aquellas medidas anecdóticas y puntuales que se propongan para mejorar la situación de la obesidad en la población española, salvo para, eso sí, maquillar una manifiesta inacción de la administración.

al final… no hacer nada… o hacer cosas que no sirven para nada, desemboca en el mismo resultado.

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nota: mi agradecimiento para adolfo aracil marco (@aaracil1) por hacerme llegar estos interesantes contenidos.

imagen: vlado vía freedigitalphotos.net

5 comentarios en “Las claves de los raros casos de éxito en el control poblacional de la obesidad

  1. Ahí está, la clave está en hacerle frente a la industria alimentaria y anteponer la salud y el bienestar de los ciudadanos a los beneficios económicos de las grandes empresas, pero muy pocos se atreven a ello. Más bien, creo que aquí estamos hablando de una hermosa excepción.

  2. Yo considero que el tema de la obesidad depende de dos circunstancias: metabolismos (cómo se queman las calorías) y neuronas (donde reside el apetito variable según personas), a partir de ahí lo ideal sería inventar un medicamento capaz de manejar y controlar esas dos variables.
    Comer sano es muy bonito, pero aún comiendo sano, habrá personas que les engorde unos alimentos más que a otras.
    Luego para mi no creo que se trate ni de dietas ni de ejercicio ni de fuerza de voluntad.
    “Hay personas que les engorda hasta el agua” y es bien cierto.

  3. De Finlandia deberíamos copiar no solo su programa para luchar contra la obesidad infantil sino también muchas de sus políticas contra la corrupción y la desregulación del capitalismo.

    Y recuerda que si buscas Tiendas Online de Alimentación y Bebidas somos tu web de consulta, visítanos en http://elpedidohosteleria.com

  4. Me parece una barbaridad que se afirme en pleno siglo XXI que haya quien hasta el agua le engorde. No, no y no. Bueno… dejando el beneficio de la duda, habría que ver qué estudios científicos avalan esa afirmación, porque parece mas bien sacada de los creadores de la dieta del grupo sanguíneo o de la dieta del color del iris.
    Si hablamos de una enfermedad, tipo hipotiroidismo, si que podríamos llegar a un entendimiento, pero seguiría siendo algo relativamente facil de tratar con una dieta bien balanceada en energía y su correspondiente actividad física; en cualquier caso, ésto no debería influír en los porcentajes de poblaciones enteras, que son los que dejan al descubierto sus vergüenzas.
    Como se dice en este post, hace falta dar un golpe de autoridad sobre la mesa (con sentido común, claro). Aunque según mi experiencia, también haría falta una población que hiciera caso y aquí los pueblos mediterráneos cojeamos bastante, ya que nuestra cultura es viva la vida, viva el vino y las mujeres, y que los problemas los resuelva Rita la cantaora; generalizando, claro.

  5. El agua hincha y a quien retiene líquidos irremediablemente le engorda.
    Y según como queme o metabolice cada organismo, una persona engordará más que otra aunque coman lo mismo.

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